jueves, 28 de febrero de 2008

100 AÑOS DEL EVENTO DE TUNGUSKA


Dado que se trata del post Nº 200 del blog, quise elegir algo realmente especial, intrigante y raro. Nada mejor entonces que conmemorar los 100 años del Evento de Tunguska.
El Evento de Tunguska fue una explosión aérea de muy alta potencia ocurrida sobre las proximidades del río Podkamennaya en Tunguska (Evenkia, Siberia, Rusia) en la posición 60º 55' Norte, 101º 57' Este, a las 7:17 del día 30 de junio de 1908.

(Mapa de localización del evento)

Se manejaron a lo largo de los años más de 30 hipótesis y teorías de lo ocurrido. La detonación, similar a la de un arma termonuclear de elevada potencia, ha sido atribuida a un objeto celeste. Debido a que no se ha recuperado ningún fragmento, se maneja la teoría de que fue un cometa que estaría formado de hielo. Al no alcanzar la superficie, no se produjo cráter alguno.

(Foto satelital de Tunguska en la actualidad)

La explosión fue detectada por numerosas estaciones sismográficas y hasta por una estación barográfica en el Reino Unido, debido a las fluctuaciones en la presión atmosférica que produjo.
Incendió y derribó árboles en un área de 2.150 km², rompiendo ventanas y haciendo caer a la gente al suelo a 400 km de distancia. Durante varios días, las noches eran tan brillantes en partes de Rusia y Europa, que se podía leer sin luz artificial. En los Estados Unidos, los observatorios del Monte Wilson y el Astrofísico del Smithsonian observaron una reducción en la transparencia atmosférica de varios meses de duración, en lo que se considera el primer indicio de este tipo asociado a explosiones de alta potencia.
La energía liberada se ha establecido, mediante el estudio del área de aniquilación, en aproximadamente 10 o 15 megatones.

(Tunguska en 1927 - foto 1)

Según testimonios de la población local (nómades de origen mongol) que lo vio caer, «brillaba como el Sol». Informes del distrito de Kansk (a 600 km del impacto), describieron sucesos tales como barqueros precipitados al agua y caballos derribados por la onda de choque, mientras las casas temblaban y en los estantes los objetos de loza se rompían.
El conductor del ferrocarril Transiberiano detuvo su tren temiendo un descarrilamiento, al notar que vibraban tanto los vagones como los rieles.

(Tunguska en 1927 - foto 2)

El estudio del Evento de Tunguska fue tardío y confuso. El gobierno zarista no lo consideró prioritario cuando se produjo. Recién en 1921, ya durante el gobierno de Lenin, sería cuando la Academia Soviética de Ciencias envió una expedición a la zona dirigida por el minerólogo Leonid Kulik.

El clima del lugar permitió que la alteración de las huellas del impacto fuera muy poca a través de los años. Kulik hallaría un área de devastación de 50 km de diámetro, pero ningún indicio de cráter, lo que le resultó sorprendente.

(Leonid Kulik - minerólogo expedicionario)

Los relatos que recogió Kulik de los habitantes, hablaban de un "sol cilíndrico" que los testigos habían visto desplazarse por el cielo y estalló a 8.000 metros de altura sobre el Río Tunguska, destrozando todo en un radio de 32 kilómetros.

El ganado, en fuga por el espantoso ruido, fue incinerado al ser alcanzado por la masa de aire en ignición, mientras que las tiendas de los tunguses, ubicadas a 60 km del lugar, volaron por el aire junto con sus caballos y posesiones. Los ciudadanos manifestaban haber visto una monstruosa nube en forma de hongo elevándose desde los bosques de Tunguska, creciendo firme en el aire quieto y recorrida por muchos colores.

También recogió testimonios que indicaban que algunos de los pobladores supervivientes de la explosión, terminaron muriendo a los pocos días de la misma, afectados por una extraña enfermedad que se manifestaba a través de pústulas horrorosas. Los médicos soviéticos lo atribuyeron a una epidemia de viruela en la zona (probablemente porque aún faltaban 20 años para ver los efectos de la radiación en los sobrevivientes de Hiroshima y Nagasaki).

(Auroras boreales posteriores a Tunguska)

Kulik se obsesionó con el tema. Logró que se financiara una nueva expedición en 1927, que se dirigió al epicentro del fenómeno, pero una vez más no encontró el cráter que buscaba.

Participó de dos expediciones más, encontrando en una de ellas un pantano profundo, que identificó como el cráter producido por la explosión. Pero una vez que se extrajo toda el agua del mismo, se descubrió que era una simple hondonada natural que el agua había rellenado.

Para mayor sorpresa, durante la última expedición, realizada en 1938, se llegó a la conclusión de que la onda expansiva de la explosión original debía tener un diseño similar a las alas de una mariposa, o sea que se habían producido dos explosiones simultáneas.

Kulik moriría durante la Segunda Guerra Mundial, sin haber llegado a ninguna conclusión valedera.

(Tunguska en 1927 - foto 3)

En los años '50 y '60, otras expediciones hallaron microlitos cristalinos muy ricos en níquel e iridio enterrados por toda la zona, lo que refuerza la teoría de que pudo tratarse de un objeto natural de origen extraterrestre. También se encontraron pequeñas partículas de magnetita.

Una expedición italiana de 1999 asoció el lago Cheko, que se encuentra en la zona, como el cráter buscado por tantos años. Otros científicos han puesto en duda esta hipótesis, ya que existen en la zona del lago árboles con más de cien años.

(Diagrama de una posible hipótesis)

Las hipótesis planteadas a los largo de los años han sido numerosas. Un meteorito fue la primera, pero la ausencia de cráter la hizo discutible.

Ya por 1930, algunos astrónomos de renombre dejaron atrás la idea de un meteorito, para indicar la posibilidad de que se tratase de un cometa o una parte de un cometa, pero la presencia de níquel en la zona (elemento no común en los cometas) debilita la posibilidad. Además, la presencia de un cometa hubiera sido materia de observación para los astrónomos de la época.

(Registro de los sismógrafos de 1908)

Otros astrónomos elaboraron la hipótesis de un cometa de difícil observación, que hubiera pasado desapercibido para los observatorios por provenir de una dirección cercana al Sol. Se trata de una explicación bastante discutible.


(Diagrama de la hipótesis de una explosión de plasma)

Entre 1989 y 1990, diversos astrónomos propusieron otra posibilidad: la de un cometa de deuterio, que podía haberse fusionado nuclearmente. Otros científicos niegan esta hipótesis, pues sería necesaria una cantidad de deuterio anormalmente alta en el cometa para validarla.

Algunos físicos teóricos exploraron la posibilidad de que haya intervenido la antimateria en el fenómeno, pero se trata de una hipótesis que no va más allá del pizarrón.

De igual tono son las teorías acerca de explosiones de plasma naturales o inducidas.


(Diagrama indicativo de la dirección de la caída de los árboles)

Por su parte, una expedición científica rusa del año 2004 anunció haber hallado pruebas contundentes de que el objeto de Tunguska fue una nave extraterrestre.

En efecto, un comunicado de la administración de la región rusa de Evenkia, difundido por la prensa digital, ha señalado que "los exploradores de la fundación estatal siberiana Fenómeno Espacial Tunguska opinan que han encontrado elementos de un artefacto técnico extraterrestre".

Se mencionó en ese momento el hallazgo de dos barras de un material desconocido por completo, no volviéndose a tener noticias de dicha expedición.

(Lugar del Evento del Mediterráneo)

Por extraño que parezca, el Evento de Tunguska no es único, sino que ha habido otros casos más cercanos en el tiempo.

El Evento del Mediterráneo Oriental fue una explosión aérea de alta potencia ocurrida sobre el mar Mediterráneo en la posición 34º N, 21º E (entre Libia, Grecia y Creta) el día 6 de junio de 2002. La detonación, similar a la de una pequeña bomba atómica, ha sido atribuida a un objeto celeste no detectado durante su aproximación a la Tierra. Supuestamente, el objeto se desintegró y sus fragmentos no han sido recuperados. Al no alcanzar la superficie y ocurrir sobre el mar, no se produjo cráter.


(Tunguska en la actualidad)

El Evento de Cando o Suceso de Cando se refiere a una supuesta explosión ocurrida en la aldea gallega de Cando (Outes), la mañana del 18 de enero de 1994. Los testigos aseguran haber observado una bola de fuego surcando el cielo durante más de un minuto.

Dado lo apartado y agreste de la zona, inicialmente no se localizó el lugar del impacto. Dos días después, el departamento de astronomía de la Universidad de Santiago de Compostela inició una investigación sobre lo ocurrido, que tras dos meses hizo pública una posible zona de impacto, donde se habría hallado un cráter de 25 metros de diámetro por 1,5 metros de profundidad.

La investigación sugiere un gran impacto, que habría desplazado a 60 metros de distancia algunos pinos de más de 20 metros de altura. Todo este conjunto se hallaba a unos 300 metros de un núcleo de población y a unos 75 metros de la casa más cercana.

(El lago Cheko)

El Evento de Vitim o acontecimiento de Bodaybo fue una explosión de medio kilotón ocurrida en torno a las 22:00h (hora local) del 25 de setiembre de 2002 en la taiga próxima al río Vitim, cerca de la ciudad de Bodaybo (Irkutsk, Siberia, Rusia).

En esta zona se han hallado importantes cantidades de radiación residual en forma de tritio e isótopos radiactivos de cobalto y cesio. Un avión de transporte que volaba en el área se estrelló por causas desconocidas. También se observaron extrañas auroras boreales y enfermedades asociadas a la radiación.

(Tunguska en la actualidad)

Tanta similitud con una explosión nuclear resultaba extraña para las autoridades rusas, que estudiaron el fenómeno a fondo en las expediciones VITIM-2003 y VITIM-2005.

Por el momento, la explicación oficial indica que se trató del núcleo de un cometa de entre 50 y 100 metros de diámetro, compuesto de metales pesados que entraron en fisión al penetrar en la atmósfera terrestre. Este objeto no habría sido detectado durante su aproximación a la Tierra.

El acontecimiento fue registrado por estaciones sismológicas y también por un satélite antimisil de Estados Unidos.

(Tunguska en la actualidad)

El dato curioso (y escalofriante): si la explosión de Tunguska se hubiera producido sobre una ciudad, los efectos habrían sido terribles.

Por ejemplo, como se ve en el diagrama de abajo, una ciudad como Londres hubiera resultado arrasada. Además, es probable que semejante detonación hubiera sido rápidamente confundida con un ataque nuclear, desatando una cadena de represalias automática.

(La explosión de Tunguska proyectada sobre un mapa de Londres)

Lo cierto es que, a cien años del evento, nadie sabe a ciencia cierta qué diablos pasó allí.

3 comentarios:

Fonzi dijo...

Gracias Pelado !!
Ya recibí las fotos que mandaste !
Estoy intentando que me permitan entrar al castillo para fotografiarlo y filmarlo por dentro.
Si me dan el permiso , te aviso y si queres te venis conmigo ...

Impresionante tu blog....
Como andube chusmeando cosas de Pittamiglio por varios lados , y muchos me mandaron cosas , no seabia quien era quien !!
Puse tu blog entre mis links preferidos , y de ahora en mas seré visitante asiduo !!

pelado1961 dijo...

Me alegro que hayas recibido las fotos y que tengas buena opinión de este blog.
El tuyo está linkeado en mi lista de "Blogs y Páginas posta".
Ah! Y tenés aquí un post dedicado para vos: "Hoplitas en Montevideo".
Hasta pronto!

JMA dijo...

Si de verdad estas interesado en esclarecer este ¿misterio?
Investiga sobre los experimentos que realizo el señor Tesla en esa época, sigue con los actuales experimentos de las antenas HAARP y con los agroglifos (crop circles).
Ves preparandote para acontecimientos del futuro cercano que cambiarán el mundo y a la humanidad......